¿Educación? ¿Eso con qué se come?

Ayer, domingo 4 de marzo, después de la presentación de la colección UNAM en historia de México en la Feria Internacional del Libro de Palacio de Minería, el rector de la Universidad José Narro Robles, señaló que en México existen 5.4 millones de mexicanos que viven en la condición de analfabetismo y que no es problema de edades, ni de grupos étnicos o de género, sino que es problema del país; y que no se trata de personas de 59 años o más, como la semana pasada aseguró el director del Instituto Nacional para la Educación de los Adultos, quien también dijo que el problema no es grave y que se solucionaría en 6 años.

Creo que el problema de la educación en México, va más allá. Hay personas en extrema pobreza, que seamos sinceros, prefieren comer a estudiar. Y no los culpo. Yo incluso en algún momento durante la Universidad tuve que elegir entre comer o estudiar. Y decidí comer. Por suerte mi racha fue momentánea y fui capaz de retomar mis estudios.

Pero a la vez es frustrante ver la calidad de educación en México. Sí, el alumno hace a la escuela, pero es triste escuchar a chavitos de primaria usando un lenguaje tan grosero que parece que estás escuchando a un chavo de 29 años hablando con sus amigos en plena Lagunilla.

Pero todo este problema empieza desde casa. Hay papás y mamás que ven a la escuela como una salvación. "Dejo al/la niñ@ en la escuela y ahí que se encarguen de él/ella". Pero no. La educación comienza en casa. Si formamos niños responsables que sepan valorar la oportunidad de estudiar y lo que tienen en casa, otro resultado tendríamos.

Por desgracia... (sí, aún hay más) cuando el problema no está en el niño, está en algunos maestros. Yo conozco a maestras que su vocación es real. Enseñar y educar a los niños es su meta y su alegría. Pero también hay maestros que en su vida han querido hacer algo por los demás y que sólo cuentan los días para poder jubilarse.

¿Entonces, qué? ¿Estamos perdidos? No. Por suerte somos muchos los ciudadanos concientes que tenemos en mente esta problemática. Todo se resume en que la calidad educativa que des en casa, es la que vas a intentar continuar durante la escuela del niño. Yo soy de esas personas que sabe que si educamos bien a los niños de hoy, México en muy poco tiempo podría tener otra calidad de vida. Empezando por lo social y con el tiempo ir escalando hasta la economía propia del país. Con niños educados que resultaron buenos en la academia, concientes con el entorno social en el que viven y un producto valioso para el sector laboral.

¿Ilusa? ¿Esperanza ciega? Yo no tengo hijos, y mi servicio social en la UNAM se llama "Adopta un amig@". En este programa, te asignan un niño/a de nivel primaria en el que tienes que dejar la semillita de seguir estudiando. En su mayoría son escuelas de sectores socioeconómicos regulares-bajos y el punto es hacer una diferencia en sus vidas. Hacerles ver que hay más allá en la vida que Britney Spears o Justin Bieber. Que la información es poder. Que mientras más sepan, más libres serán.

Ojalá la gente se diera cuenta de que en sus niños tienen armas poderosas para que México crezca y sea el país en el que todos queremos vivir. Y no huir de él.

Hasta el próximo lunes ;)


By Marianna

Tw: @SweetRagamuffin